Helkanor – Posada La Yegua Desbocada
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lordnazgul9.
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20/10/2014 at 15:00 #341074
Aragorn_IIParticipantAntes de escribir os recomendamos por favor que os leáis la información general y las normas de esta zona de rol. Muchas gracias 😉
Posada La
Elfa BriosaYegua Desbocada, en la aldea de CandurCandur (pinchad en la imagen para verla a mayor tamaño)
Candur es una aldea poco poblada; casi parece una villa fantasma. En su momento, fue una de las más importantes ciudades del reino de Benrost, que dominaba gran parte del territorio de Helkanor.
Las gentes de Candur son poco hospitalarias y recelan de los extraños, algo normal teniendo en cuenta la zona inhóspita en la que viven. Lo más notable de la ciudad es el gran mercado que se encuentra en su plaza principal y calles de alrededor. En ese mercado, existe una afamada posada, llamada La Yegua Desbocada en la que los viajeros pueden alejarse del frío y arrimarse a un fuego amigo. Aunque encima estaba escrito con letras blancas el nombre de ‘La Yegua Desbocada’, sobre la puerta principal aún se distinguía el nombre original de la posada, ‘La Elfa Briosa’, tallado en la madera. Y en algunas zonas de la sala común, bajo la pintura desconchada, se pueden ver imágenes de una hermosa Elfa con una jarra de cerveza en la mano o en actitudes muy desinhibidas.
La posada está regentada por Baldric y su hija Elaen.
La Sala Común de la posada (pinchad en la imagen para verla a mayor tamaño)
[NOTA IMPORTANTE: Este tema abarca la totalidad de la posada, tanto la Sala Común, las salas privadas y las habitaciones de la posada. También se puede escribir sobre cosas que sucedan en el exterior de la posada, siempre a una distancia razonablemente cercana de ella, claro xD]
29/10/2014 at 22:55 #341919
BattosayParticipantA través de la nieve, en lo que se resistía a llamar camino por respeto a sus antepasados carreteros, una figura embozada hasta los ojos se acercaba a la aldea de Candur. Si alguien lo veía de lejos, envuelto en tantas pieles habría podido confundirlo con un oso o con un sobrino por parte de madre de Beorn. Pero el que lo oyese canturrear se preguntaría de qué casa de curación de habría escapado.
Dando saltitos y girando de vez en cuando sobre sí mismo llegó a Candur, en lo que sería más tarde recordado como “el día que llegó el de los saltitos”. Atrayendo las miradas de los que le rodeaban, se acercó a un chico joven y le preguntó:
– Disculpa, niñita, ¿la posada?
El niño señaló en una dirección y salió disparado hacia su casa mientras llamaba a su madre a voces.
– Estos candurianos están majaretas – pensó y siguió hasta la posada canturreando- Y cinco limones y medio limón. Y seis limones y medio limón. Y siete limones y medio limón. Y ocho limones y medio limón.
Se paró ante lo que parecía la posada contemplando el cartel.
– Curioso nombre. Aquí debe de ser.
Así que se encaminó hacia la puerta y la abrió de una patada que hizo saltar las bisagras en un alegre tirabuzón inverso con mortal y medio hacia delante, quitó el polvo de la pared frontal de la posada, crujieron algunas vigas que ni el albañil sabía que estaban ahí e hizo tirar la camarera las copas que llevaba en la bandeja sobre un parroquiano del lugar.
– ¡Camarero, mozo! ¡Una ronda para todos! ¡Y eso que has tirado, también lo pago! Si es que no sé por qué los hombres os empeñáis en llevar faldas ¡Yo invito, que tengo que celebrar mi último trabajo bien pagado! Y traeme un pollo asado entero, un buen trozo de empanada y aguamiel del bueno. Y… ¿qué tienes en el menú de plato principal?
01/11/2014 at 1:34 #342093
NELLAParticipantKira estaba tranquilamente sentada junto al fuego y preguntándose como era posible que hiciera tanto frio en esa región cuando de pronto una ráfaga de viento helado hizo temblar las llamas de la chimenea, dirigió la mirada hacia la puerta de la posada que se había abierto de golpe y una figura alta envuelta en pieles entró vociferando, parecía un hombre pero no estaba segura.
Cuando dijo “una ronda para todos” Kira se apresuró a pedir porque ya estaba escasa de fondos y no era cosa de andarse con remilgos.-Yo tomaré lo mismo que él, pero la mitad, con eso será suficiente.
-Gracias señor, sois muy amable al invitar…. ¿puedo preguntaros vuestro nombre? … y de donde venís?
01/11/2014 at 10:02 #342094
TejoCazador14561ParticipantEntré en el pueblo de Candur calentándome las manos con unos guantes de tela. Estaba acostumbrado al frío del Bosque Blanco, pero noté que incluso aquí aumentaba. Había conseguido unas monedas perdidas en el bosque, y ya estaba cansándome de cazar animales fuera de la sociedad. Quería estar más con la gente, ya que me sentía solo después de la muerte de mi padre, y el único contacto que tenía era el de los animales. Además quería llevarse algo nuevo a la boca, y no carne mal cocinada o pescado crudo.También quería dejar la cabaña, y conseguir otro trabajo para vivir mejor. No quería morir con una vida tan triste, y haber si encontraba habitación en alguna posada.
Ya estaba anocheciendo, pero estaba acostumbrado a la noche, ya que siempre volvía muy tarde a la cabaña. Toqué una puerta por la que se entraba a la aldea. Era grande, pero se veía muy vieja y posiblemente hacía muchos años que nadie se había molestado de limpiarla.
Volví a tocar, pero me fije que hacía años que nadie cuidaba esa puerta, posiblemente porque nadie iba o salía de la aldea, y los extraños eran mal tratados. Empujé la puerta y me fije que ya estaba abierta y no había nadie por ahí.
Empecé a caminar buscando alguna posada, y vi a algunos niños jugando. Les sonreí amistosamente, pero me fijé que salían corriendo a otro sitio. Luego intenté hablar con un señor mayor, pero me tuve que ir corriendo al ver que sacaba un bastón. Definitivamente no se podía hablar tranquilamente con alguien de aquella aldea, así que me limité a buscar carteles que me indicaran la posada.
Seguí recto un camino, buscando alguna posada, pero no encontré ninguna. Las tiendas empezaban a cerrarse, y vi como había gente que estaba preparando un mercado, que posiblemente mañana sería el día del mercado. Afortunadamente encontré a un hombre que se veía simpático, que estaba colocando las mesas, donde más tarde estarían los productos.
-Disculpe señor, ¿sabe dónde hay alguna posada?
Vi como me señalaba con el dedo una calle estrecha. Le hice un gesto de gracias y seguí mi camino. De lejos la calle parecía muy pequeña, pero se iba haciendo más grande hasta llegar a una pequeña plaza, que terminaba con un edificio que finalizaba la calle. Me fijé en el cartel que decía: ”Posada la Yegua Desbocada”.
Vi por la ventana que había bastante gente, por el ruido que se escuchaba, la música y las luces de la ventana. Empujé la puerta y me fijé en el interior: había muchas mesas y sillas, y al gente gritando y bailando. Me fije que la mitad estaba borracha y me dirigí hacia el hombre que servía bebidas y comida.
-Una pinta y para cenar…Un filete de cerdo y algunas patatas. Ah, y un plato de champiñones.
Quería probar algo diferente, y comer carne bien cocinada. Dejé unas monedas en la barra y me dirigí a una mesa en la esquina, a esperar hambriento a la comida.
01/11/2014 at 11:15 #342100
BattosayParticipantBattoin se fijó en la persona que le había hablado. Ropas holgadas y abrigadas, la cara marcada por el frío y aún encima sin barba.
– Bueno – pensó, – no suelo tener mucha suerte, así que sigamos confiando en ella hasta que pase la racha.
Lanzó una moneda al aire y salió cara.
– Hombre, entonces – se dijo y mientras se acercaba a su mesa y se sentaba.
– Me llamo Battoin, hijo de Boin – dijo presentándose. – En cuanto a de dónde vengo es más dificíl de responder, amigo.
La camarera llegó y le sirvió lo que había pedido. Battoin le echó el diente tan pronto estuvo en la mesa, a punto de morderle el brazo a la camarera, que le echó una mirada de odio. Él no le prestó atención.
– Llevo de viaje bastante tiempo, así que dependerá desde dónde quieras escuchar la historia. Mi última parada ha sido Framburgo, dónde he hecho un buen negocio que estoy celebrando. ¡Mozo! – gritó – ponedme un trozo de ese cerdo que estáis asando. Pero las historias pueden esperar a después de comer, es de mala educación hablar con la boca llena – dijo mientras deglutía una empanada cuyas las migas fueron a explorar el suelo, la mesa y el vaso de su interocutora.
01/11/2014 at 12:17 #342104
TejoCazador14561ParticipantGiré la cabeza desde mi sitio y vi a un hombre que parecía muy hambriento. Estaba pidiendo algo cuando yo entré, y cuando una chica trajo su comida, creía que la camarera iba a perder el brazo. Solté una pequeña carcajada y volví a concentrarme sobre mi futuro. Aquella posada parecía un lugar con mucha diversión, y seguro que no moriría de aburrimiento. Además, si poco a poco me integraba con el pueblo, dejaría de tener el título de extraño y sería uno más, así que lo que haría después de comer sería alquilar una habitación.
Estaba metido en mis pensamientos, cuando una mujer me interrumpió, con la comida en la mano. Los ojos se me abrieron como dos platos, al ver aquella comida, sobre todo la carne. Acostumbrado a ver sangre y tierra en ella, aquello era una divinidad de los Valar. Vi como en la mesa, la camarera depositaba una cerveza, un plato de champiñones, carne y patatas. Era una gran festín, después de 20 años comiendo carne cruda.
Empecé con los champiñones, uno a uno, saboreando este gran momento, ya que no sabía si en el futuro me lo podría permitir de nuevo. Me disgusté cuando terminé, pero había sido un gran momento. Bebí un poco, y empece con la carnes y las patatas.
**************
Ya estaba andando hacia la barra con la barriga llena. Había sido lo mejor que había probado en mi vida, y tenía que aprovecharlo. Había comido hasta el último gramo de la carne, era maravillosa. Mi objetivo ahora era encontrar habitación para la noche.
-Perdone señorita, ¿tienen habitaciones?- vi que me hacía un gesto afirmativo con la cabeza y sonreí- Deme una por esta noche- dij mientras dejaba unas monedas. La tercera a la izquierda nada más subir las escaleras me dijo.
Volví a mi sitio, para esperar un rato antes de irme, a ver si encontraba algo de diversión.
01/11/2014 at 20:36 #342122
Aragorn_IIParticipant01/11/2014 at 23:56 #342139
NELLAParticipant¿Amigo?… Kira miró sorprendida al hombre que tenía enfrente, era un hombre si, no cabia duda, pero muy poco refinado… ¿de donde habría salido?. Se tocó la cara y el pelo… cierto que estaba un poco desaliñada después de tan largo viaje pero aun así…. llamarla amigo.
-Disculpad pero soy una mujer -dijo- Mi nombre es Kira finmorwen, señor, para serviros y vengo del lejano sur.- añadió – tratando de ser amable, pues en modo alguno quería enemistarse con tan peculiar personaje ahora que tenía la comida en la mesa.
Se puso a comer con apetito sin dejar de echar miradas de soslayo a su anfitrión e intentando mantener su vaso lo mas alejado posible de él mientras pensaba que no estaría de mas acercarse al mercado de Kibil-Dûm y comprar algún vestido abrigado y unas pieles, no debía descuidar su aspecto y mucho menos morir de frío….. Mmmm ¡Amigo! -se dijo- no podía creerlo.
02/11/2014 at 20:58 #343497
JRM-008ParticipantTras la larga caminata, Rírian por fin había llegado a Candur. El pueblo, revestido de blanco tras la fuerte nevada, se erguía sobre el blanco valle. Rírian caminó colina abajo hasta llegar al pueblo en sí. Mientras caminaba por las desiertas calles, ocultó a Roulon bajo su capa. Lo último que le apetecía a Rírian eran problemas.
Preguntó a una anciana que pasaba donde podía encontrar un lugar donde resguardarse. Su único gesto fue señalar hacia la derecha, y tras darle als gracias extrañado, Rírian prosiguió su camino. Divisó lo que parecía ser una posada y sonrió, agradecido. Pero justo entonces alguien le empujó, tirándolo al suelo. Al segundo una cuchillo apretaba su garganta y la voz de un hombre retumbó en su oído:
– Dame todo tu dinero, y podrás ir en paz.
Rírian se rió y con un rápido movimiento lanzó l hombre hacia atrás, haciéndole estrellar en la nieve. Le propinó un puñetazo y cuando iba a su otro puño se dirigía de nuevo a su cara, un segundo asaltante le lanzó un tajo al hombro.
Rírian, enfurecido, desenvainó a Roulon y atravesó el estómago de su agresor. Este gimió y calló al suelo, tiñendo la blanca nieve de rojo. El otro ladrón huyó corriendo hacia la posada, y Rírian desenvainó a Roulon y corrió tras él. A medio camino le placó, tirándole al suelo. Intentó sujetarle, pero este se desasió y siguió corriendo. Rírian se incorporó rápidamente de una patada tiró al hombre contra la puerta de la posada, haciendo que se desencajase el marco y tirándola al suelo. Todos los huéspedes de la posada guardaron silencio, observándole. Un hombre sentado en la esquina de la posada le miró y se levantó, mientras el posadero tragaba saliva.
– Perdonen- dijo Rírian- estaba arreglando asuntos con este amigo mío.
Agarró de los hombros a su agresor y de un empujón le lanzó afuera. Después cerró la puerta y sonrió.
– Siento el alboroto. Y por cierto, hay un hombre muerto no lejos de aquí. Quien quiera problemas conmigo le seguirá, así que mejor déjenme en paz.
Se acercó a la barra y tras lanzarles unas monedas al tabernero dijo:
– Una jarra de cerveza y un filete con patatas, gracias.02/11/2014 at 22:49 #343502
BattosayParticipantBattoin sufrió un repentino ataque de tos, la comida se le atragantó en la garganta y el tono de su cara enrojeció hasta casi empezar a iluminar la estancia.
– Mujer… – pensó. – Por ahí va la suerte que tenía, bueno, bastante ha durado.
Carraspeó la garganta, tragó y bebió un poco de su vaso. Sin poder levantar la vista de su plato, balbuceó una disculpa.
– Ejem, disculpadme, ha sido una pequeña confusión. Yo, lo siento mucho.
En ese momento entraron dos hombres peleándose en la posada. Battoin agradeció la interrupción, permitiéndole cambiar de tema.
– Siento el alboroto. Y por cierto, hay un hombre muerto no lejos de aquí. Quien quiera problemas conmigo le seguirá, así que mejor déjenme en paz.
Se acerco a su compañera de mesa y le habló en voz no demasiado baja.
– ¿A cual de los dos dice que seguirá quien le moleste? ¿Al muerto o al que ha salido por la puerta? Odio quedarme con la duda, no sé si preguntarle…
03/11/2014 at 15:38 #343556
JRM-008ParticipantDespués de pedir la cena, Rírian se dirigió hacia una mesa vacía, y mientras caminaba hacia ella, oyó a un hombre susurrar
– ¿A cual de los dos dice que seguirá quien le moleste? ¿Al muerto o al que ha salido por la puerta? Odio quedarme con la duda, no sé si preguntarle.
Se rió y de un golpe se apoyó en la mesa, mirando al hombre fijamente.
– Al muerto, claro está. Qué pasa, ¿te gustaría seguirle?03/11/2014 at 23:11 #343591
BattosayParticipantEstaba oscuro en la posada y no se veía bien. No podía estar seguro si tan vivaz cliente llevaba barba o no.
– Bueno, el anterior era mujer y la confundí con un hombre – pensó -, las mujeres se suelen ofender mucho cuando me pasa y est@ parece bastante irascible.
Se levantó y se dirigió hacia el recién llegado
– Gracias, mi señora por solventar mi duda – dijo con una reverencia. – Mas confundís mis intenciones, no quería provocar la ira de tan bella dama, sólo era una vulgar duda. He invitado a toda la posada a una ronda y permitidme hacer lo mismo con vos – levantó su copa y gritó. – ¡Por nuestra nueva amiga! ¡Que Varda guarde su belleza y virtud!
04/11/2014 at 0:05 #343595
NeumeModeratorDesde su casa, algo retirada del centro de Candur, se dirigió hasta la posada. Pronto aquel camino tendría varios centímetros de nieve y necesitaría de su montura para llegar, pero por ahora, con tan solo “ligeras nevadas”, aprovecharía para pasear un poco.
Llegó al mercado, se plantó frente a la taberna y empujó la puerta suavemente.
“¿Qué le ha pasado?” se preguntó. Miró hacia un lado y vio las bisagras en el suelo.
-Vaya, “se acerca el invierno” (guiño, guiño xD) y por lo que se ve se ha escapado un oso… o algo parecido – dijo a media voz a la vez que se quitaba la capucha.Se acercó hasta la barra mientras veía los restos de bebida por el suelo, y a la hija del dueño recogiéndolo apresuradamente. Le pidió a Baldric una copa de vino blanco y mientras esperaba que le sirvieran observó disimuladamente a los comensales. Aquella noche el lugar estaba bastante lleno y veía alguna cara nueva. En algunas mesas el ambiente parecía más tenso que en otras.
04/11/2014 at 14:49 #343615
JRM-008ParticipantRírian, enfurecido, tiró la copa de aquel hombre al suelo, desenvainó a Roulon y la posó suavemente en su garganta.
– ¿Acaso me estás insultando? Creo haber dejado claro que no quería problemas.04/11/2014 at 16:29 #343621
aratirModeratorA pesar del frío, aquella noche Baldric andaba sudando como si fuera verano. Pero más que por calor era por los nervios que se le habían metido al cuerpo. Estaba preocupado por los nuevos clientes que estaban llegando a su local, sobre todo aquel montaraz, el de la espada, el cual no le gustaba ni un pelo.
—Vuestra copa de vino blanco, señorita —dijo Baldric, acercándole el pedido a la joven que acababa de llegar a la posada.
No acababa de dejarle a la recién llegada el vino blanco en el mostrador cuando el montaraz desenvainó su espada de nuevo y atacó al muchacho de los saltitos.
—¿Qué ocurre esta noche? —se preguntó en voz alta. Y, a continuación, llamó a su hija—. ¡Elaen! ¡Ven para acá!
Su rostro compungido no disimulaba la preocupación.
—Ha sido llegar el invierno y ya nos trae problemas —le dijo a la recién llegada que había pedido el vino blanco. -
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