Se cuenta que un montaraz llamado Eldarion vagaba por los bosques matando a criaturas montruosas que estaban dispuestas a tramar algún plan malvado contra hombres, enanos o elfos. Su cualidad era huir sin ser visto con una facilidad impresionante o escapar con muchísima destreza de cualquier peligro. Siempre tenía hospitalidad en cualquier ciudad o posada siempre que no fuesen propiedad de alguna mala criatura. Este montaraz estaba acompañado de un elfo, Alagar, cuya cualidad era el conocer del lenguaje de los animales, bien fuese hablandolo o entendiéndolo, pues años atrás capturó un wargo, y tras largo tiempo, cuando el wargo cogió confianza con él, se hizo su amigo y le dejó montar en él, este caso jamás se había visto y era difícil que se volviera a repetir, pues la mente de los wargos era malvada e incluso hacían pactos con los trasgos de las Montañas Nubladas.
En otras ocasiones Eldarion y Alagar habían ayudado a los enanos en una gran batalla contra los trasgos de las montañas, pues estos arrasaron sus minas con multitud de criaturas monstruosas y ahora los enanos debían hacerle frente. En esta batalla los enanos no eran los suficientes y un capitán enano llamado Borong se encargó de pedir ayuda cuando por descuido se adentró en el Bosque Negro y fue capturado por orcos, Eldarion, (que en estos momentos caminaba sólo) liberó a Borong y los dos se encaragaron de los orcos, cuando por desgracia, un capitán orco se enfrentó con Borong este perdió el meñique de la mano izquierda y Eldarion se vio obligago llevarlo a las ciudad más cercana para curarle. Al final se hospedaron en una posada, a las afueras de Dol Guldur, una fortaleza situada en el sudoeste del bosque negro. Esta fortaleza la tomó Celeborn después de la caída de Sauron y Galadriel derribó los muros y limpió los fosos.
Por la mañana, en la posada Borong le comunicó a Eldarion la futura guerra entre los enanos y los trasgos y también le dijo que temía que ya hubiesen sido atacados. Eldarion aceptó ayudar pero pensó que con él no hiban a parar la guerra, entonces sugirió al enano que podrían ir a las afueras de Lothlorien y pedir ayuda y consejo a un amigo llamado Alagar, Borong aceptó y al anochecer llegaron a su casa, situada en la copa de un sauce. Entraron y se encontraron a Alagar hablando con unos cuervos que le estaban informando de las nuevas de otras tierras. Continuará… (es que ahora no tengo ganas de seguir escribiendo)