| Descripción del Personaje |
De cabello negro azabache, largo y liso, lo suele llevar suelto, auque tambien le gustan las trenzas adornadas con hojas elficas.
Sus ojos, grandes, son del color de la miel y a traves de ellos se refleja todo lo que siente en su alma, estos le dan una luz especial a su cara, en el momento en el que pone los ojos sobre ti te ilumina.
El resto de su rostro es más frio, con una tez morena, una nariz pequeña y unos labios rosados, tambien es poseedora de unas orejas graciosamente puntiagudas, como las de todos los de su raza.
Es de constitución delgada, alta y tiene unos graciosos andares.
Su caracter es dificil de entender, ya que su cara mas conocida es la de una elfa guerrera: recia firme y decidida, pero en el fondo de su alma esconde una dulce, timida e incomprendida niña a la que todavia le queda mucho por conocer.
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| Historia del Personaje |
Hija de una Gran Señora Elfa del Bosque Negro y un Elfo guerro al que poco conocio, pues cuando Anardil era pequeña el salio a la guerra del anillo y ya no volvio, su madre la crio con mucho amor y le enseño todos los secretos y sabidurias de los Elfos, pero ella decidio seguir los pasos de su padre y convertirse en una elfa guerrera.
Desde pequeña, como su nombre indica (amante del sol), siempre ha sido una enamorada del sol y el dia, del verano y el calor, de las playas y el mar, siempre soñadora aguardando los dias soleados. Por el contrario triste y desdichada en los dias nublados, necesita la fuerza del sol para vivir, su peor enemigo el frio y la oscuridad que la transportan a un mundo negro donde pierde su fuerza de elfa guerrera.
Cuando Anardil llego a la edad de elegir su futuro, su madre la incito a que buscara un elfo de gran linaje y se casara, pero ella decidio seguir sola como siempre habia estado, y como le gustaba estar, ya que si pretendia ser una guerrera no podria atender a su esposo ni darle hijos, aunque en el fondo de su corazón su mayor ilusión seria la de algun dia poder tener algun hijo al que traspasarle toda su sabiduria y a quien amar con toda su alma.
Durante sus años de juventud se preparo muy bien para ser una estupenda guerrera, y cuando lo consiguio partio con su gran caballo blanco y la espada de su padre, que tenia el nombre de Tintallë (iluminadora) y poseia la fuerza de la luz.
Paso muchos años luchando en diferentes guerras y viajando por toda la tierra media, hasta que un dia encontro al ser que nunca hubiera podido imaginar que existiera; se llamaba Tarciryan (señor de los barcos), era un dúnadan de Gondor, tenia un fisico imponente pero bello, de cabellos castaños y un poco ondulados, ojos verdes y almendrados, y una voz grave pero que inspiraba una gran confianza.
Un dia soleado, como le gustaba a Anardil, estaba paseando por la playa y llego a un puerto, alli atando un barco se encontraba Tarciryan, cuando se dio la vuelta y sus miradas se cruzaron este quedo prendado de Anardil, pero ella con toda la rudeza que siempre le gustaba aparentar decidio subir a su caballo y marcharse.
Unos pocos años mas tarde en medio de una batalla cerca de los puertos grises se volvieron a reencontrar, y no fue casualidad, ya que Tarciryan habia pasado todo ese tiempo desde que se conocieron buscandola y al fin la habia encontrado. Cuando sus ojos se cruzaron por segunda vez Anardil ya no pudo esconder mas sus sentimientos hacia el y por fin decidio dar rienda suelta a sus emociones y empezar a ser feliz junto al hombre del que estaba enamorada.
Anardil y Tarciryan se quedaron a vivir junto al mar que tanto les gustaba y alli formaron una familia, teniendo esos hijos que en el fondo de su ser siempre habia querido tener.
Hasta que un dia, despues de mucho tiempo, sus hijos ya habian partido cada uno hacia su destino, Anardil se sintio cansada, sus ojos se estaban apagando, ya que por culpa de la guerra del anillo la luz se estaba apagando y los dias se levantaban nublados y oscuros, ella ya no era feliz, asi que Tarciryan preparo una embarcación y los dos partieron de los puertos grises con rumbo a una tierra con mas sol.
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