Nacida en Cuiviénen, habitó aquí en sus primeros días, y luego partió con los Noldor hacia el oeste, al encuentro con los Valar. Al ver a Oromë y Nahar, su corazón se hinchó de admiración por Nahar, esa noble y hermosa criatura, y de ahí en adelante la estancia que más visitó y de quién más aprendió fue de Oromë, aprendiendo mucho de las criaturas de arda, y sus lenguas. A los caballos siempre se sintió unida.
Tuvo gran amistad en Valinor con Aredhel la blanca, con quién compartía el gusto por la caza y el cabalgar, pero preferia andar sola recorriendo Aman. También visitaba con frecuencia a Yavanna y de ella heredó el amor por los Árboles, a quienes admira y ama, y ahí tambien estaba Aulë. Siempre fue bien recibida en el Taniquetil y ahí visitó a Varda a quien todos los elfos veneraban, y de ella aprendió sobre las estrellas, y amó los vientos de Manwë y de las águilas fue amiga. En la casa de Miriel, la primera esposa de Finwë, aprendió sobre el tejido, y de este en el que más se deleitó fue en el tejido con las manos.
Pero su corazón es aventurero y en el no hay miedo, y aunque vivía en paz en Valinor y se sentía feliz, su corazón quería conocer otros rincones que no conocía. Por esto al oír las palabras de Fëanor en Tirion, su corazón ardió y quizo partir en busca de cosas nuevas, pero también por otra razón, al ver a los árboles muertos y que la luz primera ya no era, también quizó ir y combatir a Melkor, no quería quedarse en Valinor sin hacer nada, y aunque su corazón estaba dividido, porque amaba a Oromë y a Yavanna y a Aulë y las Águilas de Manwë y a los Teleri de quien se sentía hermana, porque admiraba a Ulmo y amaba cuando el viento y el mar se unian en las olas, y junto al agua sentía paz, emprendió el viaje, y llegó a araman por tierra, y su corazón se entristeció al ver las naves de los Teleri quemadas y todo lo que habá sucedido, porque era amiga de los hijos de Fëanor (aunque no sentía amor por el padre de ellos), y así cruzó Helcaraxë, fortaleciéndose aún más y siguiendo fielmente a su casa, la casa de Fingolfin.
Peleó en muchas batalla de la Primera Edad, formando parte de la caballería de Maedhros en la frontera, ya que, cuando el partió a esas tierra, Alatáriel decidió ir con ellos, para defender Beleriand y como las disenciones estaban perdonadas entre Fingolfin y los hijos de Fëanor (aunque no del todo), fué y acompaño a su amigos de antaño. Después de la cuarta batalla de las guerras de Beleriand, quedó muy mal herida y erró por las montañas cercanas a Himring, días y días camino sin destino y tambaleando, pero finalmente fue vista por la guardia de Gondolin y llebada ante Turgon. Así llegó a Gondolin con heridas de guerra, Turgon la reconoció y fue bien recibida ahí por su antigua amistad con Aredhel quién ya había muerto, lo que fué un gran dolor. En Gondolin se recuperó lentamente y amó ese lugar.
Cuando se recuperó del todo, se negó a quedarse en las casas y mansiones, y aunque Turgon no quería acceder a la petición de Alatáriël, cedió y finalmente formó parte de la guardia de Gondolin, y asi recibió el nombre de Loraciel, por que era de corazón valeroso y como una profunda melodía, aunque luego fue llamada por los hombres Emeldir "La de Corazón Viril", y allí en Gondolin visitaba con frecuencia a Thorondor en las alturas. Y se quedó en el reino de Turgon, en parte porque no podía salir por la ley del Rey, pero en realmente no quería irse, porque era un lugar hermoso y estabas sus amigas Águilas.
En la Nirnaeth Arnoediad, era parte e los ejércitos de Turgon que fueron en ayuda de Fingon.
Larga es la historia de Alatáriël Loraciel, por lo que no puede ser contada completa.
Después de la caída de Númenor. Tuvo gran amistad con los Dunedain del norte, y protegió esa tierra junto con ellos y viviendo allí largo tiempo con Gil – Galad, y fue tanto lo que vivió junto a los dunedain que en ciertas ocaciones llegaba a parecer uno de ellos. Después de la muerte de Gil – Galad, se va de estas tierra, aunque no quería dejar a sus amigos Dúnedain, pero tampoco quería dejar a su gente, así que se va con Galadriel a Lórien, con ella hizo una gran amistad, ya que tenían un carácter similar y también el nombre las unía. En Lórien habitó principalmente, y esa fue su nueva su tierra, donde aprendió la lengua de los Galadhrim, viviendo como ellos, y haciéndose más profundo su amor por los árboles. Su gente fueron los Galadhrim hasta hoy, pero su corazón siempre fue noldo y siempre se presentó como Noldo Galadhim o Silvano. Se sentía muy unida a Lórien pero aún así, su corazón era errante y en numerosas ocaciones salía de Lorien e iba al encuentro con sus amigos Dúnedain, donde siempre fue recibida y recorrió muchos rincones de la Tierra Media, conociéndo muchas criaturas y haciendo muchos amigos de todas las razas.
En la Guerra del anillo peleó en varias batallas, junto a su gente y también independientemente, obteniendo aún más amigos entre la raza de los hombres, y aunque esto le traia mucha alegria, tambien le traia dolor, por ya habia tenido que separarse de muchos de su amigos y amigas de la raza de los hombres, y quizás nunca más los volvería a ver, por que el destino de los hombres es desconocido.
Y ahora, después de la guerra del anillo, durante el reinado del Rey Elessar, vagabundea por la tierra media, viajando por muchos lugares, visitand a sus amigos, resistiéndo a regresar a Valinor lo más que pueda, aunque sabe que al final partirá.