Categoría: El Hobbit
Etiquetas: El Hobbit, Ian McKellen, peliculas
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En una reciente entrevista, Ian McKellen habla de El Hobbit, admite que en un principio se resistió a la idea de volver a interpretar a Gandalf, habla de las diferencias entre el Gandalf que veremos en El Hobbit y el que vimos en El Señor de los Anillos.

En The New Zealand Herald publican una entrevista con Ian McKellen en la que el actor británico habla de su participación en El Hobbit y de muchas otras cosas, somo sus reticencias iniciales, las diferencias entre el Gandalf de El Señor de los Anillos y el Gandalf de El Hobbit. En primer lugar, muchas gracias a nuestro compañero @Earendil84 por haber traducido la entrevista. En ella, McKellen admite que se resistió a la idea de volver a meterse en la piel de Gandalf, en parte debido a su edad. “A los 73 [años], tu pasión por la vida no es tan fuerte como pudo serlo, tus energías se ven un tanto mermadas y no pasa un día sin que pienses en la muerte”, comenta el actor. Aunque esa no fue la única razón de sus dudas, también le preocupaba repetirse y no crear algo original. “Normalmente, no quieres volver a un personaje al que ya has interpretado antes, de modo que me sentí dividido ante la perspectiva, especialmente mientras el proyecto estuvo ‘que ahora sí’, ‘que ahora no’ durante dos años”, explica. “Cuando era que no, todo lo negativo en torno al papel resurgía: ‘es un rodaje largo; es el mismo personaje; tuve que vivir lejos de casa durante una eternidad.’ Pero cuando volvía a ser que sí todo lo positivo entraba en juego – ‘estará bien volver a Nueva Zelanda; será fantástico trabajar de nuevo con el antiguo equipo; será encantador ver a Peter Jackson y Fran Walsh,’ quienes son un deleite.”

Sin embargo, el propio McKellen reconoce que al igual que millones de fans de todo el mundo, no veía a ningún otro actor interpretando a Gandalf. “Egoístamente, es porque no puedo imaginar a otro interpretándole,” admite entre risas. “Ese fue, finalmente, el detonante, porque me dejaron muy claro que fuera lo que fuera que decidiera, la película iba adelante – yo no era un rompe-películas. También dejaron claro que había muchos otros que interpretarían encantados a Gandalf. Sabiendo eso, pensé: ‘ellos nunca tendrán esa oportunidad’ porque había invertido mucho en el personaje para que cualquiera llegara y lo continuara, como Dumbledore en las películas de Harry Potter.”

Además, el Gandalf de El Hobbit tiene otros matices que el que vimos en El Señor de los Anillos, algo que atrajo a McKellen. “Rápidamente se hizo patente que este Gandalf no era exactamente el mismo personaje que antes, aquí su papel político está más presente – lo ves intentando persuadir a las personas y manipulando la jerarquía de la Tierra Media de un modo que no se ve en El Señor de los Anillos – y por supuesto es un poco más joven y un poco más enérgico”, revela. “No para que de repente se ponga a dar volteretas, porque cuando tienes varios miles de años, ser 60 años más joven no es una gran diferencia.”

Otro de los aspectos que más atrajo a McKellen fue la posibilidad de trabajar junto a Cate Blanchett en muchas escenas, algo que no pudo hacer en la trilogía de El Señor de los Anillos. “No lo hicimos antes, pero estuvimos dos semanas rodando juntos para esto y fue terriblemente bien porque también es una persona del teatro, así que tenemos mucho en común”, comenta el actor. “Tuve dos maravillosas escenas con ella. Una fue muy personal, una delicada escena en Rivendel, donde ella expresa su interés hacia mí. Había una maravillosa puesta de sol tras de mí, y ella vio un mechón de pelo fuera de lugar y delicadamente lo alcanzó y lo devolvió a su sitio. Le toqué la mano, y entonces bajó la mirada, pero desapareció”, dice con nostalgia. “Peter grabó todo esto y estuvo realmente pillado con el tema – pensé que igual sería un pelín demasiado sentimental – pero aún está en la película, pienso. Así que fue un momento especial, que me recordó por qué volví”.

Pero no solo Gandalf es distinto, también lo son las películas mismas. “También el énfasis de estas películas es muy diferente, porque es sobre un Hobbit y unos Enanos fastidiosos – que no estaban en El Señor de los Anillos– embarcándose en una aventura, no intentando salvar la Tierra Media”, añade McKellen, quien también reconoce que estas películas son más divertidas. “Sí, hay mucha más comedia porque algunos de los mejores humoristas del mundo están en ella, como Billy Connoly, Barry Humphries y Stephen Fry”, dice. “Peter nos habría dicho alguna vez, más bien innecesariamente, ‘sed más divertidos’ cuando estábamos rodando”, añade. “Muchos de los Enanos son también extremadamente divertidos pero pienso que la mayor sorpresa va a ser Martin Freeman. Pienso que su actuación va a ser su gran golpe porque también es ya bastante conocido, como actor cómico, va a ser una sorpresa verle de repente llegar como un gran actor de cine, hecho y derecho, que es lo que va a pasar. Una vez más, Peter Jackson ha logrado triunfos, y no decepciona con el reparto…”

(Imagen © de WireImage)