Espero no meter la pata en este asunto, pero creo que Tolkien nunca mencionó qué era de los espíritus (fëa) de los Hombres después de que sus cuerpos (hröa) murieran. Y tanto Aragorn como Arwen estaban sujetos al Destino de los Hombres, asi que no se sabe qué fue de sus espíritus tras sus muertes.

Si no me equivoco, en El Silmarillion o en algún otro escrito se dice que el fëa de los Hombres se detenía brevemente en las Estancias de Mandos y que después abandonaba los Círculos del Mundo, a un destino desconocido tanto para los Elfos como para los propios Valar.

De todas formas invoco a @Elfo_Negro, @Hombre_Cetrino y @Nirnaeth para que puedan arrojar más luz sobre este asunto 😉

Un saludo!

Tal como ha dicho Aragorn_II y Nirnaeth, Tolkien no explica el cómo será o no será la vida de “ultratumba” de los hombres, lo deja, muy explícitamente, como un misterio.
Teniendo en cuenta que Tolkien era “creyente” y que en su mundo hay un tal Ilúvatar, con unas características muy similares a las de los dioses “monoteistas”, especialistas en crear los mundos de ultratumba, que prácticamente tienen todas las religiones (aquí quedaría bien algo de “Humano, demasiado humano”, pero no os aburro), teniendo en cuenta eso, decía, podemos imaginar que Tolkien había pensado en que sí existía algún tipo de vida-post-mortem :p pero no quiso especificarlo.

Eso de la duda debe ser muy inglés, os sonará eso de:

“Ser o no ser, esa es la cuestión
…
…¿quién querría
seguir cargando en la cansada vida
su fardo abrumador?… Pero hay espanto
¡allá del otro lado de la tumba!
La muerte, aquel país que todavía
está por descubrirse,
país de cuya lóbrega frontera
ningún viajero regresó, perturba
la voluntad, y a todos nos decide
a soportar los males que sabemos
más bien que ir a buscar lo que ignoramos.”

😉

Debo hacer aquí una puntualización. Según “El Silmarillion”: “No obstante, ya desde hace mucho los Valar declararon a los Elfos que los Hombres se unirán a la Segunda Música de los Ainur; mientras que Ilúvatar no ha revelado qué les reserva a los Elfos después de que el Mundo acabe, y Melkor no lo ha descubierto”.

La última  frase de Aragorn nos muestra su fe personal en la vida del más allá para los seres humanos; debe, por tanto, ser tomada como un indicio sobre la religión de los dúnedain, no sobre el destino de los Hombres en el mundo literario de Arda. Sin embargo, las palabras que he citado del libro póstumo de Tolkien nos muestran la existencia de almas humanas después del fin del mundo (y, si se refiere a todos los miembros de la raza humana y no sólo a los que sigan con vida en ese momento -cosa muy probable, no creo que persona alguna sobreviva al final del Universo- tras la muerte física). Como Arwen y Aragorn comparten el destino de los Segundos Nacidos, todo esto se aplica también a ellos.