Perfil Básico

Nombre

tari

Fecha de nacimiento:

1900-10-05

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Más Información

Página web

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Ficha de Personaje

Nombre del Personaje

Ancalimon

Raza

maiar

Lugar de la Tierra Media

en las estrellas

Descripción del Personaje

Tari Ancalimon, puede obtar por muchas formas, aunque la permanente es la que tiene en Valinor:
viste de azul y de plata y su cabello refleja las luces exparcidas por su propia danza.

Historia del Personaje

Poco sé de la historia de esta maia y lo que sé vino de sus propios labios.Los hombres le han puesto muchos nombres, de cuales, no mencionaré ninguno aquí.
Tari a menudo, está en el norte y cuando baila exparse una luz por los cielos, la aurora boreal le llaman algunos. Y ese baile tan hermoso, es acompañado por el eterno sonido del viento y la naturaleza,evocando a la primera nota y suele pasar que a veces esa música surge de un pequella flauta de madera; cuando se observa en el cielo y se escucha aquella melodia, los humanos suelen hacerce más prudentes y sabios. Ésta es su historia tal y como me fue relatada a mí:

Tari Ancalimon llegó tarde a los confines de Arda, pues durante mucho tiempo estuvo a lado de Eru, ya que su luz le era tan hermosa que no quería separarse de ella. Fue entonces que Eru le entregó el más preciado de sus dones: la esperanza.

-Tú Tari, eres entre todos los Ainur, quien más aprecia mi luz y cuando mis hijos nascan, los amarás y el don que te doy les ayudará a no caer en las sombras del mismisimo Melkor, porque tú serás su oposición y jamas te vencerá, Dama de la enterna esperanza.

Éstas fueron las palabras de Eru,Tari las escuchó y por última vez, antes de irse del lado de su señor, bailó para él y ese baile era luz y fue tanta la gracia redamada, que ella misma se expulsó de los confines intemporales, entonces frente a ella aparecieron las estrellas y su baile exparció esa luz por el norte y esta vez, estaba acompañado de una música, la misma de la creación.

Melkor fue el primero en verla, pues su morada aún estaba en el norte, primero la deseó y después la odió, supo entonces que jamas podria corromperla, porque ella portaba algo más grande que sus propias sombras. La segunda en verla, fue Ilmarë su hermana, triste y melancolica soliá pasear por los cielos, esperando a que ella decidierá tocar Endor. Y ahora estaba presente, con algo que no alcanzaba a comprender; la llamó y Tari acudió a ese llamado, grande fue el encuentro de las dos hermanas y eso se reflejo en los cielos. Fue llevada a Almaren, donde se presento a los valar, ofreciendo sus servicios a Varda porque en ella más que ningún otro, estaba reflejada la luz de Iluvatar.

De ahí en adelante ayudó a la Valië en sus trabajos, sin embargo Tari a menudo no estaba en Alamaren, pues quisó recorrer la inmensa Arda, así supó de las tierras de más allá del mar occidental, llevo esta información a los Valar, que despues de la guerra con el oscuro decidieron partir aquella tierra que se convertiria en su morada, la bendecida Valinor.

Al nacer los primeros hijos y saber de la boca de Oromë en donde se encontraban, fue a su encuentro y les llevo su baile, los elfos se maravillaron y siempre la tuvieron en enorme estima, pues durante el gran viaje ella los deleitó con su luz, dandoles esperanza, Tari supó después que al darles ese don, jamas moriria en sus corazones. Cuando la mayoria estuvo en Valinor, regreso de nuevo con los Avari y estuvo con ellos durante mucho tiempo.

No pisó Valinor, cuando Melkor fue desencadenado y permaneció en el norte, lejos de todo aquello que sabía tendría un mal final. Sin embargo, estuvo atenta y fue ella la que ayudó a subir a Tilion al cielo y cuando la barca del sol surcó por primera vez las estancias de Ilmen, ella dejó el norte y viajó al este, allá en Hildorien, donde los hombres habían despertado. Y a ellos también les infundió la llama de la esperanza, pero había algo diferente. Pues mientras que con los elfos,solamente se dedicaba a permanecer en su compañia, a los hombres quiso darles algo más, deseo protegerlos en contra de la sombra de Melkor.

No dijo nunca palabra, tampoco dijo su nombre ni quien la había mandando, se acercó a ellos y con la mirada les indicó que hicieran un círculo y se sentarán, los hombres le obedecieron, después sacó su flauta, comenzó a tocar y los hombres al escucharla tuvieron una visión:

Las tierras de Aman, los prados siempre verdes, la magnificencia de unos seres fuera de su comprensión y que poco después llamarían Dioses, las aguas cristalinas sin macula y los elfos, unas criaturas hermosas dotadas de gracia y sabiduría; la visión cambió y les mostró las tierras allá en el norte, donde Melian ejercía su poder, miraron las estrellas como las miraban los Sindar antes del sol y la luna. Pero entonces apareció otra cosa muy diferente, un futuro no muy lejano donde muchos de ellos morían y sus espíritus viajaba a un lugar que Tari desconocía, se asustaron en un principio, sin embargo aquella muerte no significaba un fin, porque después vieron mas vida, niños jugando en tierras libres de oscuridad y entendieron que su estancia en la tierra podía ser corta, no así su historia que permanecería gravada en la memoria de los que seguían y así serian inmortales.

La música termino, la maia los miró durante un momento, les daba dos opciones viajar al oeste y vivir entre aquellos que habían nacido a la luz de Aman, la otra opción era quedarse ahí en Hildorien y vivir junto a ella, así se harían mas prudentes y sabios. El grupo se dividió entonces en dos, el primero viajó al oeste y mucho tiempo después los elfos les llamaron los Edain que en lengua elfica significa “los segundos”; los que se quedaron se llamaron así mismo Noliënar, los descendientes(o pueblo) del sol.

Fue así que los descendientes del sol aprendieron del mundo gracias al conocimiento de la mujer y se hicieron más sabios y prudentes que sus congeneres, no hicieron la guerra mientras no fue necesario y el amor que le tenían a todas las cosas vivas, era igual de profundo que el amor de la maia por ellos.

Sin embargo y conforme avanzó el tiempo, Tari presintió que los descendientes del sol no podían estar exentos del mal y que muy pronto desaparecerían de la tierra como desaparecen las palabras cuanto se elevan con el viento.

Los vientos siempre cambian su dirección y a los Noliënar les llegaron rumores sobre la guerra de los hijos de Eru contra Melkor y de como un marinero se había hecho a la mar en busca del perdón de los Valar y de la mujer convertida en ave con una estrella en el pecho. Los descendientes del sol entendieron que debían reunirse con sus hermanos los Edain y que su destino pronto seria cumplido.
Los eventos de la guerra de la cólera se cuentan en otra parte, los Noliënar ayudaron a los Edain, pero sufrieron demasiadas bajas, así pues regresaron apesadumbrados a sus tierras y la reina de aquel pueblo, decidió abandonarles pues nada en su corazón le apelaba seguir atada aquellos dogmas, ya Tari sabía de la corrupción de la regente y fue tanta su tristeza al ver que le dejaba el trono a un hermano más corrupto que ella, que partó poco después y ya jamas se le vio entre lo segundos.

Pero en Valinor, tampoco permaneció en paz, ya no solía pasearse entre los primeros nacidos y cada vez se alejo más de los hijos de Eru, sin embargo el amor que les tuvo siempre fue demasiado grande y nunca se alejó del todo. Y la prohibición de Eru sobre los Ainur de no entrometerce más en los asuntos de los hombres y de quedarse en Valinor, no la tocó a ella y a su hermana, pues eran las únicas capaces de ir y venir de Valinor si querían. Pero no se expusieron a la compañia de lo hombres y Tari nunca se alejo del norte.

Su don no murió nunca, al contrario, se fortalecio, pues ahora pocos eran los hombres que la miraban en el cielo y cuando veían aquella aurora, se hacían más prudentes y su corazón se hinchaba de esperanza y fueron estos hombres(sin saberlo), los mensajeros de la Dama de la eterna esperanza, fueron ellos lo que expracieron su luz a los segundos, que ya no suelen creer.