Si ayer mismo os contábamos que la grave situación de la MGM podría tener pronto una solución, lo cual es una gran noticia para El Hobbit, hoy nos encontramos con otra nueva dificultad para el proyecto. Y es que en The One Ring se hacen eco de una información publicada por Variety según la cual, siete grandes sindicatos de actores de todo el mundo han pedido a sus miembros que no participen en El Hobbit por la negativa de sus productores a firmar un acuerdo con los intérpretes neocelandeses. Uno de ellos es el sindicato de actores más poderoso e influyente de todo el mundo, el Gremio de Actores de Estados Unidos (Screen Actors Guild), con más de 120.000 afiliados. Si queréis ampliar la información, pinchad en leer más…El origen del conflicto se encuentra en los intentos del sindicato de actores australiano, Media, Entertainment & Arts Alliance, de negociar un salario mínimo y otras condiciones laborales para los actores neocelandeses que actualmente no están sindicados. Finalmente, y ante la imposibilidad de alcanzar un acuerdo con los productores de El Hobbit, la Federación Internacional de Actores intervino y pidió a sus afiliadas en todo el mundo que instaran a sus miembros a que se negaran a participar en El Hobbit como muestra de solidaridad a sus compañeros neocelandeses. De hecho, el Gremio de Actores de Estados Unidos publicó el viernes una alerta en la que pedía a sus miembros que no participaran en El Hobbit, y que incluso les notificaran si desde la producción contactaban con ellos para intentar contratarlos:

«Los responsables de El Hobbit – que se rodará en Nueva Zelanda el año que viene – se han negado a contratar a intérpretes mediante acuerdos negociados con los sindicatos. Miembros del Canadian Actors Equility, US Actors Equility, el Gremio de Actores de Estados Unidos, UK Actors Equility, the American Federation of Television and Radio Artists, Media, Entertainment & Arts Alliance (Australia) y la Alliance of Canadian Cinema, Television and Radio Artists aconsejan no aceptar trabajo de esta producción no sindicada. Si contactan con usted para contratarle para El Hobbit, por favor, notifíquelo a su sindicato inmediatamente».

Evidentemente, ésta es una medida de presión para forzar a los productores de El Hobbit a que lleguen a un acuerdo con el sindicato de actores australiano. De hecho, se rumorea que las ofertas a los actores por parte de la producción de El Hobbit son «inminentes», por lo que la presión sobre los productores es aún mayor, ya que ningún actor (y mucho menos las figuras de renombre internacional) se arriesgará a desafiar a su correspondiente sindicato.

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